El Santuario de la Virgen del Tura

Olot capital de La Garrotxa, una ciudad rodeada de volcanes con historia, tradiciones, gastronomía, museos y más. En la provincia catalana de Girona, camino al parque natural de La Garrotxa, es imperdible dar una vuelta por Olot.

En el Santuario de la Virgen del Tura, muy importante en la historia del origen de Olot, se recuerda que en una carta se menciona por primera vez a Olot, cuando el rey Carlos II el Calvo, dona la iglesia de Santa María de Olot y su territorio al abad de dos monasterios benedictinos. En las visitas guiadas se explica que Olot significa antigua.

El santuario conserva la imagen de la Virgen del Tura, talla de madera dorada del siglo XI/XII, se veneraba como la virgen morena, pero en los años 80 fue restaurada y notaron que el humo de las velas le daba el tono.

Otra curiosidad, fuera de la iglesia hay esculturas de piedra iguales a la talla de madera. Queda poco de la antigua iglesia, destruida por terremotos y guerras. Tura significa toro en catalán antiguo, narra una leyenda que un toro rascó el suelo en el mismo sitio por días y su dueño cavó y encontró la imagen de la virgen patrona, que sale en procesión en las fiestas de Olot.

Otro lugar de interés, la iglesia de Sant Esteve, en su museo parroquial El Greco con Cristo abrazado a la cruz. Data del siglo XVIII con fachada de maciza con tres hornacinas vacías donde estuvieron representados San Esteban, San Valentín y Santa Sabina.